El regreso a clases es un momento emocionante y a la vez, un desafío para estudiantes y profesores por igual. Después de las largas vacaciones, tanto los alumnos como los docentes vuelven a encontrarse en el aula, estableciendo un nuevo ciclo de aprendizaje. Sin embargo, este reencuentro puede generar ansiedad y nerviosismo, especialmente en los estudiantes que se enfrentan a un profesor nuevo. Para disipar estas tensiones y fomentar un ambiente de aprendizaje positivo desde el principio, es crucial amenizar las primeras semanas de clases con divertidas dinámicas que permitan a los alumnos conocer al profesor.

Para ello, os propongo el siguiente material, una colección de tarjetas con diferentes enunciados en los que los alumnos deberán identificar cuál es verdadero y cuál es el falso respecto al profesor. Además os comparto la plantilla en blanco de las tarjetas por si queréis ampliar el ejercicio con más preguntas.

Las dinámicas de introducción no solo rompen el hielo, sino que también ayudan a construir vínculos más fuertes entre el profesor y los alumnos. Cuando los estudiantes sienten que conocen a su profesor de manera más personal, se sienten más cómodos al hacer preguntas, expresar sus preocupaciones y participar activamente en el aula.

La confianza es fundamental en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Las dinámicas de introducción pueden ayudar a generar confianza entre el profesor y los alumnos. Cuando los estudiantes ven que su profesor está dispuesto a participar en actividades lúdicas y a mostrar un interés genuino por conocerlos, es más probable que confíen en él y se sientan cómodos compartiendo sus pensamientos y dudas.