¡Atención, valientes escritores! En esta ocasión traemos un recurso terroríficamente divertido: una plantilla de una casa encantada en la que los alumnos podrán dibujar o escribir su propia historia de miedo. Una propuesta ideal para celebrar Halloween o para fomentar la creatividad, la imaginación y la expresión artística en el aula.
La plantilla muestra una misteriosa casa encantada con distintas habitaciones. En cada una de ellas hay un recuadro o espacio donde los niños pueden crear una escena: pueden escribir una parte de su relato, dibujar un momento de tensión o incluso inventar qué personajes habitan cada habitación. Fantasmas, brujas, monstruos, murciélagos o arañas… ¡todo cabe en esta terrorífica mansión del miedo!
Esta actividad es perfecta para trabajar tanto la expresión escrita como la educación plástica. Los alumnos pueden planificar su historia, pensar su principio, desarrollo y final, y representar cada parte dentro de una habitación diferente. Al hacerlo, estarán desarrollando habilidades de organización narrativa, secuenciación temporal y creatividad visual.
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