La atención es una habilidad cognitiva fundamental en el desarrollo de los niños. Es un proceso mental que nos permite concentrarnos y enfocarnos en la información relevante mientras filtramos las distracciones. La capacidad de atención influye en el rendimiento académico, el aprendizaje, la resolución de problemas y el desarrollo socioemocional de los niños. Por lo tanto, es esencial fomentar y desarrollar esta habilidad desde una edad temprana.

Una forma efectiva y divertida de trabajar la atención en los niños es a través de juegos, y uno de los juegos más populares para este propósito es el Memory. El Memory es un juego de cartas en el que los jugadores deben emparejar las cartas que contienen imágenes iguales. Requiere concentración, memoria visual y atención sostenida, ya que los jugadores deben recordar la ubicación de las cartas para hacer coincidir los pares.

Este juego estimula la concentración; los niños deben prestar atención a las imágenes en las cartas y recordar su ubicación para encontrar los pares. Al jugar regularmente, desarrollan la capacidad de mantener la atención durante períodos más largos, lo que se traduce en un mejor enfoque en tareas académicas y actividades diarias.

Además de desarrollar la concentración y la memoria visual, el Memory también promueve la atención sostenida. A medida que los niños buscan los pares de cartas, deben mantenerse enfocados en la tarea y resistir las distracciones. Esta capacidad de atención sostenida se traslada a otras áreas de la vida, como el estudio o las conversaciones, donde es necesario mantener el enfoque durante períodos prolongados.