El recurso manipulativo de emparejar cucuruchos y bolas de helado por colores es una herramienta fantástica para trabajar la atención y la asociación de colores en los más pequeños. No solo es una actividad divertida y atractiva, sino que también proporciona una serie de beneficios cognitivos y motores que son fundamentales para el desarrollo infantil.

Identificar y emparejar colores específicos ayuda a los niños a desarrollar su capacidad para enfocar la atención en detalles particulares de una tarea. La atención selectiva es crucial para el aprendizaje, ya que permite a los niños centrarse en la información relevante y descartar distracciones.

Emparejar colores también fortalece la memoria y la capacidad de los niños para hacer asociaciones entre diferentes elementos. Recordar qué color va con cada cucurucho y buscar la bola correspondiente implica el uso de la memoria de trabajo y la habilidad para establecer conexiones.