Bonitas manualidades de animales con lacitos de pasta coloreados
Hace tiempo que tenía un paquete de macarrones de arroz en la despensa. Estaban más que caducados, pero me daba pena tirarlos, así que ahí estaban, esperando a que decidiera qué hacía con ellos. Ya sabéis que no me gusta tirar comida y, por fin, el otro día lo vi claro. Vamos a hacer un collar de macarrones de colores sin plástico. Una actividad genial para hacer con los peques en días en que necesitamos quedarnos en casa. Es perfecta para desarrollar la creatividad, paciencia, concentración y la motricidad fina. Y para ello sólo necesitamos descubrir cómo teñir pasta con colorantes sin utilizar plástico de un sólo uso.
Teñir macarrones de colores sin utilizar plástico de usar y tirar
Buscando por internet cómo conseguir macarrones de colores encontré muchísimos tutoriales y recetas. Incluso se puede teñir la pasta con colorantes naturales a partir de ingredientes como la remolacha o la cúrcuma. En mi caso, tenía colorante alimentario, así que opté por la vía rápida, aunque tengo pendiente probarlo con colorantes naturales.
En todos los tutoriales que encontré utilizaban contenedores de plástico de un sólo uso para teñir la pasta. Los colorantes alimentarios tiñen muchísimo, es verdad, pero no me podía creer que no existiera una alternativa. Me negué a utilizar una bolsita de congelación o vaso de plástico para cada color para después tirarlo a la basura para no tener que limpiarlo.
Así que opté por la solución, para mi, más obvia. El material que mejor responde a la hora de no teñirse y mantener sus características intactas es el cristal. Así que decidí usar botes de cristal para teñir los macarrones, en mi caso eran botes de conserva reutilizados.
Utilizar un bote de cristal para cada color
El resto no tiene secreto:
- Repartir la pasta a teñir en los distintos botes (es importante que cierren herméticamente), tantos como colores queramos conseguir.
- En un vaso, mezclar vinagre con unas gotas de colorante (dependerá de la intensidad que queramos conseguir).
- Vertemos la mezcla dentro del bote.
- Tapamos el bote y removemos con cuidado para que todos los macarrones queden mojados por la mezcla sin romperlos.
- Repetimos la operación con todos los botes y colores.
- Dejamos reposar durante todo un día y vamos girando de vez en cuando todos los botes para que toda la pasta se impregne por igual.
- Pasadas unas 8 horas, sacamos la pasta y la dejamos secar sobre unos trapos viejos (por si quedan teñidos).
- Una vez seca ya puedes hacer tus collares, pulseras, coronas súper coloridas y sin plástico de macarrones.
Los botes y vasos utilizados se pueden lavar fácilmente con agua y jabón o en el lavavajillas.
Si te animas a hacerlo nos encantará ver el resultado. Ahora a disfrutar con los peques.