En la infancia, el tiempo es un concepto abstracto y difícil de comprender. Para muchos niños y niñas, diferenciar entre segundos, minutos, horas o días no es algo inmediato; necesitan vivirlo, experimentarlo y reflexionarlo. Con esa idea nace esta colección de tarjetas educativas: una propuesta sencilla y divertida que invita a los alumnos de primaria a pensar cuánto tiempo tardan en realizar diferentes acciones cotidianas.
El principal propósito de estas tarjetas es ayudar a los niños a comprender el paso del tiempo y las distintas unidades que lo miden, desde los segundos hasta los años. A través del juego y la reflexión, los alumnos aprenden a asociar las unidades de tiempo con experiencias concretas y reales de su vida diaria. Así, el aprendizaje deja de ser teórico y se convierte en una vivencia significativa.
Además, esta dinámica fomenta la estimación y comparación, dos habilidades fundamentales en el pensamiento lógico-matemático. Cuando un niño reflexiona sobre si algo tarda segundos, minutos o días, está desarrollando su capacidad de razonamiento, secuenciación y organización temporal, competencias esenciales tanto en matemáticas como en su vida cotidiana.
Comprensión paso del tiempo





