La memoria visual es aquella que permite percibir, codificar, almacenar y recuperar o evocar imágenes que hemos captado a través del sentido de la vista. Se trata de una memoria muy poderosa, que permite fijar recuerdos con facilidad en el cerebro. Gracias a ella somos capaces, por ejemplo, de recordar el rostro de una persona, un objeto, una situación, un entorno…