El rotacismo es un trastorno del habla que se caracteriza por la dificultad para pronunciar correctamente los sonidos que se producen con la lengua en la zona de los dientes y las encías. Este trastorno puede afectar significativamente la comunicación y la interacción social de los niños y niñas, y es importante intervenirlo de manera efectiva en los colegios.

La intervención del rotacismo en los colegios puede llevarse a cabo a través de diferentes estrategias y técnicas que permiten a los niños y niñas mejorar su pronunciación y desarrollar habilidades lingüísticas adecuadas. Algunas de las estrategias más efectivas son:

Ejercicios de articulación: Los ejercicios de articulación se enfocan en fortalecer los músculos del habla y mejorar la coordinación de los movimientos necesarios para la correcta pronunciación de los sonidos. Estos ejercicios pueden incluir la repetición de palabras con sonidos específicos y la práctica de movimientos de la lengua y los labios.
Terapia de lenguaje: La terapia de lenguaje es una estrategia que se enfoca en mejorar las habilidades lingüísticas del niño o niña en general, lo que puede incluir la corrección del rotacismo. La terapia de lenguaje puede ser realizada por un terapeuta del habla y puede incluir ejercicios específicos para corregir la pronunciación de los sonidos afectados.
Juegos y actividades lúdicas: Los juegos y actividades lúdicas pueden ser una forma efectiva de motivar a los niños y niñas a practicar la pronunciación de los sonidos afectados. Por ejemplo, se pueden utilizar juegos de adivinanzas y trabalenguas que incluyan los sonidos afectados para que los niños y niñas puedan practicar su pronunciación de manera divertida.
Reforzamiento en casa: Es importante que los padres y cuidadores de los niños y niñas con rotacismo refuercen en casa lo que se está trabajando en el colegio. Los padres pueden ayudar a sus hijos e hijas a practicar los ejercicios de articulación y a participar en juegos y actividades lúdicas para mejorar su pronunciación.